Auditoría

En Audinfor somos conscientes de la importancia de la función del auditor en un entorno tan incierto como el actual. Por eso, nuestro equipo presta el servicio de auditoría de cuentas cumpliendo una doble función.

Por un lado, otorgamos fiabilidad a los estados financieros y cuentas anuales de la entidad auditada, aportando transparencia a su gestión y al mercado en el que se desenvuelve gracias a la auditoría. Por otro lado, identificamos y anticipamos posibles riesgos y áreas de mejora para ayudar a la estabilidad y futuro del negocio de nuestros clientes mediante conocimiento profundo de las operaciones de la entidad auditada, de sus sistemas, controles y del entorno en que opera. Porque sabemos que anticiparse y tomar decisiones fundamentadas es básico en el desarrollo del negocio.

Todo ello, aplicando las últimas herramientas informáticas, que nos permiten alcanzar nuestros objetivos con un alto grado de eficiencia, sin modificar la calidad del servicio, al mismo tiempo que nos permite ofertar unos honorarios razonables.
Los servicios que podemos proporcionar como auditores de cuentas profesionales inscritos en el ROAC, se enmarcan principalmente en los siguientes encargos:

  • Auditoría de Cuentas Anuales individuales o consolidadas
  • Auditoría de Estados Financieros intermedios.
  • Revisiones Limitadas de Estados Financieros.
  • Revisiones de Cuentas Justificativas de Subvenciones.
  • Revisión de procedimientos acordados.
  • Revisión de sistemas de control interno y de gestión.
  • Diseño e implantación de funciones de auditoría interna.
  • Informes periciales
  • Revisiones y verificaciones de hechos concretos.
  • Informes de ampliación/reducción de capital.

¿Qué empresas están obligadas a auditar sus Cuentas Anuales?

La legislación mercantil vigente obliga a auditar las cuentas anuales de aquellas sociedades que cumplan, durante dos ejercicios consecutivos, 2 de los 3 requisitos siguientes:

  • Que el total activo de la entidad sea superior a 2.850.000€
  • Que el importe de la cifra de negocios sea superior a 5.700.000€
  • Que el promedio de trabajadores empleados durante el ejercicio sea superior a 50 personas

Se entra en obligación de presentar cuentas anuales auditadas desde el segundo ejercicio en el que se cumplen al menos dos de dichos límites.
Además de las anteriores, también tienen que someterse a auditoría obligatoria, las entidades que lleven a cabo las siguientes actividades, denominadas Entidades de Interés Público (EIP):

  • Empresas cotizadas, entidades de seguros, bancos e instituciones de crédito, entidades de pago, entidades de dinero electrónico, independientemente de su tamaño y desde el primer año de actividad.
  • Instituciones de Inversión Colectiva, Fondos de Pensiones, siempre que superen determinado número de partícipes y empresas de servicios de inversión, si superan un número de clientes.

Obligaciones por recepción de ayudas o subvenciones

Las entidades que reciban ayudas o subvenciones de organismos públicos por importe superior a 600.000 euros están obligadas a auditarse y en ciertos casos también cuando están contratadas por organismos públicos.
Para más información de las subvenciones que certificamos pincha en el siguiente enlace

Obligación de presentar cuentas anuales consolidadas

La Auditoria de las Cuentas Consolidadas, es obligatoria cuando, a la fecha de cierre del ejercicio, la sociedad y su grupo superen dos de los límites fijados por la Ley de Sociedades de Capital (art. 258) para la formulación de la cuenta de pérdidas y ganancias abreviada. Según el citado artículo, podrán formular cuenta de pérdidas y ganancias abreviada las sociedades que durante dos ejercicios consecutivos reúnan, a la fecha de cierre de cada uno de ellos, al menos dos de las circunstancias siguientes:

  • Que el total de las partidas de activo no supere los 11.400.000€.
  • Que el importe neto de su cifra anual de negocios no supere los 22.800.000€.
  • Que el número medio de trabajadores empleados durante el ejercicio no sea superior a 250 personas.

¿Por qué realizar una auditoría voluntaria?

Muchos de nuestros clientes, a pesar de no cumplir con los límites anteriormente establecidos, deciden auditar sus cuentas anuales al considerar que les reporta una serie de ventajas, como pueden ser:

Muestra de mayor transparencia y claridad.
Una empresa auditada, da una imagen de mayor transparencia y claridad en el mercado, hacia sus clientes, proveedores, entidades financieras o accionistas ajenos a la gestión diaria de la sociedad.
El caso de las auditorías voluntarias, al no existir la obligación legal de auditarse, es una declaración de intenciones de los accionistas/propietarios y administradores de la entidad respecto de la transparencia, la claridad y la calidad de la información financiera suministrada en sus cuentas anuales.

Contribuye a facilitar el acceso a la concesión de financiación.
La transparencia, la claridad y la confiabilidad en la información mostrada en las cuentas anuales auditadas, suele suponer en una mayor confianza de las entidades financieras y de sus departamentos de análisis de riesgo para autorizar las operaciones financieras.

Puede ayudar a evitar conflictos entre accionistas
En muchas ocasiones los problemas accionariales surgen de la pérdida de confianza en la información contable suministrada en las cuentas anuales. El hecho de que la misma se verifique y audite por un tercero independiente contribuye a que dicha confianza no desaparezca y que incluso se fortalezca.

Permite comprobar la fiabilidad de los sistemas de control interno y de evaluación de riesgos de la entidad a auditar.
El proceso de auditoría conlleva la ejecución de una serie de procedimientos entre los que se incluye la realización de una revisión de los sistemas de control interno de la entidad para mitigar los riesgos que pueden afectar a la entidad en su negocio diario (por ejemplo: riesgo de fraude, malversación de activos, evasión de controles de supervisión, riesgo de registro de transacciones de manera incorrecta o inapropiada por un uso erróneo de los sistemas de información, o por desconocimiento de cómo se registran determinadas transacciones,…)
El objetivo de dichos procedimientos no es el de realizar una auditoría de los sistemas y procesos de control interno, pero si una evaluación de los mismos, en el contexto de la auditoría, que puede ayudar a identificar potenciales errores que de otro modo no son advertidos.

Ayuda a mantener una cultura de calidad en el área financiera.
El hecho de someter a auditoría las cuentas anuales de la entidad supone que el personal encargado de las labores administrativas, contables y financieras, con impacto en las cuentas anuales, afronten la realización de su trabajo con una cultura de calidas, al estar sometido al análisis de un revisor externo e independiente.